Las bicicletas fijas continúan siendo uno de los aparatos de gimnasia más vendidos en el mercado. Algunos consejos para aprovecharla al máximo. Comenzemos por aclarar que siempre es más cómodo usarla para colgar algo, pero sin dudas también será mucho menos útil para nuestro bienestar. Por lo tanto, la primera excusa para no utilizarla es que una bici fija, siempre terminará siendo un adorno.
Tengo una conocida que se la compro y no la usa. Probablemente tu conocida no use tampoco el horno o la máquina de cortar el pasto. No te guíes por lo que a otros les paso con la bicicleta fija. Y si no la usa, pedírsela prestada y fíjate qué te pasa a vos.
1. La que mejor nos quede. Antes de comprarnos un jean lo tanteamos varias veces en el local hasta encontrar el correcto; podemos hacer lo mismo con la bici. Si no la probamos antes de comprarla probablemente después no la usemos porque nos resulta incómoda.
2. Chequear el asiento. Hoy en día las bicis fijas brindan variadas formas de tamaño y diseño de asiento. Probar todos hasta encontrar el correcto nos puede ayudar a no tener dolores o sentirnos embarazosos al hacer el ejercicio.
3. Escoger el modelo adecuado. Bicicletas verticales, indoor bikes, recumbent. Hoy hay modelos que brindan un respaldo para el apoyo de la espalda o un diseño cercano a las bicis de carrera. Elegir el adecuado a tu gusto ayudará a usarla enérgicamente y no para colgar los abrigos.
4. Dónde comprar una bici fija. Lo más recomendable es ir a una casa especializada. Ahí podrán asesorarte sobre cuestiones técnicas que generalmente en los supermercados o casas de venta de artículos del hogar desconocen. Lo mismo que te sucede, por ejemplo, cuando compras un jean.
5. No fijarse en el precio. Es más significativo probar los aparatos que estar pendiente del precio. Puede que el que te resulte más cómodo sea el más económico. Y, si no lo es, seguramente podrás abonarlo en cuotas con alguna tarjeta de crédito y prorratearlo por menos de lo que te cuesta una cuota del gimnasio.
6. Que no sea plegable. No pienses en comprar una bici plegable, que se desarme y se achique para poner debajo de la cama. Justamente deberías que usarla y hacer ejercicios continuamente. Si va debajo de la cama, nunca más la sacarás.
7. El lugar. Busca un lugar adecuado en tu casa para la bici. Podes pensarlo antes de ir a comprarla. De esta manera además podrás elegir un color y diseño que combine con tus muebles. Y considera también, tener buena circulación de aire para poder respirar mejor (¡El garaje no es la mejor elección!).
8. Create una rutina. Ser constante en el entrenamiento es parte de poder lograr resultados visibles en el cuerpo. Fijarte días y horarios es un buen tips para poder aprovechar al máximo tu bicicleta fija.
La bicicleta fija es uno de los mejores aparatos para un uso de cardio y de tonificación de piernas. Fue, es y seguirá siendo un clásico de uso hogareño y profesional que ofrece una gimnasia sin impactos en rodillas y ayuda a mejorar la circulación sanguínea. No la desaprovechemos, escojamos la bici por un lado, y el perchero por otro.
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